Entrena tu cuerpo, reactiva tu mente y vuelve a recuperar tu figura.
Sin dieta restrictiva, sin ejercicios difíciles, con menos de 20 minutos de entrenamiento diarios, en solo 8 semanas lograrás tener la figura de tus sueños.
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Ahora puedes bajar de peso sin necesidad de estar en una dieta
Libérate de la prisión de las dietas y siéntete bien por dentro y por fuera.
Y como ventaja, perderás peso con solo 20 minutos al día, entrenarás a tu cerebro a lidiar con los sentimientos, sin recurrir a la comida cada vez que experimentes una emoción desencadenante.
Y como ventaja, perderás peso con solo 20 minutos al día, entrenarás a tu cerebro a lidiar con los sentimientos, sin recurrir a la comida cada vez que experimentes una emoción desencadenante.
Mira la experiencias de estas personas que ya tomaron el Boot Camp de 8 semanas:
Nuestra relación con la comida nos está haciendo daño y no sabemos el por qué…
La relación que tenemos con la comida y con nosotros mismos son dos de las relaciones más importantes que tenemos.
Aprender a honrar tu cuerpo y confiar en sus señales te ayuda a comprender qué impulsa los patrones de alimentación compulsiva, lo que te permite encontrar una mayor alegría y satisfacción en todas las áreas de tu vida.
Aprender a honrar tu cuerpo y confiar en sus señales te ayuda a comprender qué impulsa los patrones de alimentación compulsiva, lo que te permite encontrar una mayor alegría y satisfacción en todas las áreas de tu vida.
Despídete de la ansiedad, reconcíliate con la comida y olvídate de sentir culpa…
Mira los comentarios que nos mandan las personas a nuestro Whatsapps
Por qué no podemos decir “NO” a los alimentos ricos en carbohidratos y grasas
¡SON SIMPLEMENTE DELICIOSOS!
Pero no se trata solo del sabor. La química de tu cerebro realmente cambia cuando das un mordisco a una deliciosa rebanada de pastel de chocolate o un bagel tostado.
Los carbohidratos desencadenan una serie de reacciones químicas que finalmente conducen a un aumento en los niveles de serotonina. Cuanta más serotonina tengas en tu cerebro, más contento te sentirás (a corto plazo).
Por eso, eliminar los carbohidratos de tu dieta te pone de mal humor.
Y lo mismo se aplica a los alimentos grasos.
No es malo tener antojos, si aprendes a identificarlos…
Entonces, ¿Cómo sé si mis antojos están fuera de control?
Hay algunas señales de advertencia fáciles de identificar, que indican que tu alimentación emocional es más grave de lo que crees.
A menudo tú:
Recurres a la comida para hacer frente a las emociones difíciles (miedo, estrés, soledad, ira, tristeza ...).
Sientes vergüenza o culpa después de comer.
Te sientes atrapado en un ciclo de comer sin control y restricción compulsiva.
Buscas recompensarte con la comida.
Tienes experiencias alimenticias que se sienten fuera de control.
Comes sin sentirte conectado con la experiencia.
Comes incluso cuando te sientes lleno.
Comes hasta que no puedes ni moverte.
Te sientes impotente con la comida.
Sientes que la comida es tu único amigo.
Si tu respuesta es “SÍ” a cualquiera de estas preguntas, estás experimentando síntomas de alimentación emocional.
¿Cómo sé si es un antojo o es hambre física?
Antes de que puedas liberarte del ciclo de alimentación emocional, primero debes aprender a distinguir entre el hambre emocional y el hambre física.
Esto puede ser más complicado de lo que parece, especialmente si usas alimentos con regularidad para lidiar con tus sentimientos.
El hambre emocional puede ser poderosa, por lo que es fácil confundirla con el hambre física.
Pero hay pistas que puedes buscar para ayudarte a diferenciar entre el hambre física del hambre emocional.
Pero hay pistas que puedes buscar para ayudarte a diferenciar entre el hambre física del hambre emocional.
El hambre emocional aparece de repente
Vs.
El hambre física aparece gradualmente.
La alimentación emocional desencadena sentimientos de culpa, impotencia y vergüenza
El hambre emocional se siente cómo sí necesitara ser satisfecha instantáneamente
Vs.
El hambre física puede esperar.
El hambre emocional anhela alimentos reconfortantes específicos
Vs.
El hambre física está abierta a opciones; muchas cosas suenan bien.
El hambre emocional no se satisface con el estómago lleno
Vs.
El hambre física se detiene cuando estás lleno.
Vs.
Comer para satisfacer el hambre física no te hace sentir mal contigo mismo.
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¡SOLO POR TIEMPO LIMITADO!
¿Es posible tomar el control de mis emociones y que no dominen la manera en que consumo comida?
Es importante recordar que nuestro cerebro puede tardar mucho tiempo en desarrollar hábitos inconscientes asociados con la alimentación emocional, por lo que, comprensiblemente, se necesitará tiempo y práctica para deshacer esto.
¡Pero sí, es POSIBLE! Incluso si has tenido este comportamiento desde que tienes memoria.
El primer paso es reconocer el comportamiento sin auto-juicio.
Simplemente reconoce que lo estás haciendo. Dilo en voz alta: "Soy un comedor emocional".
Simplemente reconoce que lo estás haciendo. Dilo en voz alta: "Soy un comedor emocional".
El segundo paso es identificar tus factores desencadenantes personales.
La mayor parte de la alimentación emocional está relacionada con sentimientos desagradables, pero también puede ser provocada por emociones positivas, como recompensarte por lograr una meta o celebrar una festividad o un evento feliz.
La mayor parte de la alimentación emocional está relacionada con sentimientos desagradables, pero también puede ser provocada por emociones positivas, como recompensarte por lograr una meta o celebrar una festividad o un evento feliz.
El tercer paso es encontrar una solución emocional a tu problema emocional.
Para ir más allá de la alimentación emocional, necesitas sentir tu emoción y encontrar una solución productiva para resolverla.
Para ir más allá de la alimentación emocional, necesitas sentir tu emoción y encontrar una solución productiva para resolverla.
"¡NO ES SOLO LO QUE COMES, ES POR QUÉ COMES!"
Imagínate, cómo sería tener un control TOTAL sobre tus hábitos alimenticios.
Disfrutar de cualquier tipo de comida y nunca jamás sentirte culpable o avergonzado por comer.
Tener un control TOTAL sobre tus hábitos alimenticios.
Comprender y sentirte en sintonía con las necesidades emocionales de tu cuerpo.
Comprender y sentirte en sintonía con las necesidades emocionales de tu cuerpo.
Tener energía y sentirte motivado incluso durante un momento estresante.
Bajar de peso sin una dieta restrictiva.
Amar tu cuerpo y sentirte orgulloso de ti mismo.
Y, sobre todo, tener un plan fácil de seguir que te guíe a través de este viaje que te cambiará la vida.
Despídete de la ansiedad, reconcíliate con la comida y olvídate de sentir culpa…
Esto es lo que necesitas para tener un CONTROL TOTAL sobre tus hábitos alimenticios y sentirte bien contigo misma , sin morirte de hambre.
Tenemos la solución perfecta para ti.
Déjame contarte sobre el curso científico y más completo de América Latina para ayudarte a superar la alimentación emocional y cambiar tu vida PARA SIEMPRE.
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EL BOOT-CAMP DE ALIMENTACIÓN CONSCIENTE que con solo 20 minutos diarios en 8 semanas puede ayudarte a comprender más sobre la alimentación emocional y comer fuera de control.
Este curso completo te guía a través de algunos de los principios básicos de la alimentación sin sentido, para que puedas aprender a lidiar con tus sentimientos sin recurrir siempre a la comida y dejar de comer emocionalmente para siempre.
Aprende a tener el control de tus antojos sin tener que decirles adiós…
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¿Qué estás esperando para encontrar el mapa que te llevará a tener una mejor relación con la comida y entender tus emociones?
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Si después de seguir paso a paso “El curso en línea de 8 semanas de alimentación consciente para perder peso” no te muestra exactamente cómo tomar el control de tus emociones, cómo controlar tus antojo, si no te lleva de la mano, paso a paso para bajar de peso, para aumentar tu autoestima y evitar tu auto-sabotaje… o si no te ayuda a identificar los malos hábitos alimenticios para comenzar tu alimentación consciente y equilibrada, entonces vas a recibir un reembolso completo, sin preguntas!
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